Skip to product information
Morir para vivir

Morir para vivir

$50.00
Shipping calculated at checkout.

En este canvas titulado “Morir para Vivir”, la flor y la mariposa no son elementos separados, sino una sola metáfora del proceso al que Dios nos llama. La flor representa ese lugar donde Él nos planta, donde lo viejo muere para que lo nuevo pueda brotar. La chica con alas de mariposa nace desde el centro de esa flor como un recordatorio visual de que, cuando Dios nos transforma, primero nos lleva a un espacio de quiebre, de silencio, de rendición… igual que la mariposa dentro de su crisálida. Lo que parece final, pérdida o muerte es realmente el comienzo de algo glorioso, porque en Cristo nunca se trata de desaparecer, sino de resurgir.

Jesús mismo lo enseñó: “Les digo la verdad, el grano de trigo a menos que sea sembrado en la tierra y muera, queda solo; pero su muerte producirá muchos granos nuevos, una abundante cosecha de nuevas vidas.” (Juan 12:24 NTV).

La flor que ves anuncia justamente eso: cuando algo muere en Dios, siempre produce vida. Siempre da fruto. Siempre abre camino a algo que antes no podía existir.

La transformación de la chica mariposa también nos recuerda que “esto significa que todo el que pertenece a Cristo se ha convertido en una persona nueva. La vida antigua ha pasado; una nueva vida ha comenzado.” (2 Corintios 5:17 NTV).

Los pétalos abiertos no solo la sostienen: la anuncian. Declaran que la obra que Dios hace no solo cambia, sino que renueva, rediseña y despierta propósito.

Y en ese cambio profundo, el corazón aprende a rendirse. Aprende a morir a lo viejo, a lo que estorbaba, a lo que no llevaba a vida. Por eso este cuadro también proclama: “Mi antiguo yo ha sido crucificado con Cristo. Ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Así que vivo en este cuerpo terreno confiando en el Hijo de Dios, quien me amó y se entregó a sí mismo por mí.” (Gálatas 2:20 NTV).

Las alas representan esa vida nueva que Cristo produce en nosotros cuando cedemos, cuando soltamos, cuando dejamos que Él sea quien nos forme desde adentro.

Este canvas es mucho más que un adorno: es una declaración profética para cualquier espacio de oración, estudio o descanso. Es un recordatorio de que lo que parece romperte realmente te está abriendo. Lo que se siente como pérdida es en realidad transformación. Lo que muere en Cristo revive con propósito. Y cada vez que lo veas, te recordará que lo que Dios hace no termina en muerte, sino en belleza, vuelo y plenitud.

Porque morir para vivir no es el final

es donde realmente comienza tu propósito.

Tamaño 12 x 16 

Acrílico sobre lienzo.

CARE & MAINTENANCE

To maintain the beauty and integrity of your purchase, we recommend treating it with care. Simple maintenance practices, such as gentle washing and proper storage, can effectively preserve the longevity of your favorites. We encourage you to refer to the care instructions included with each item, designed to help you keep your purchase in top condition.

SHIPPING & RETURNS

We strive to process and ship all orders in a timely manner, working diligently to ensure that your items are on their way to you as soon as possible. Need to return something? Just let us know.

Embracing small joys

Each item is designed to blend harmoniously with your living space while adding a unique touch. We aspire to bring balance and enrichment to everyday life.

You may also like